Lilián Hirigoyen – Montevideo, Uruguay
No hay posibilidad, no hay, de volver atrás
las cartas están echadas en una mano
en la que llevas las de perder
mis dedos juegan más rápido
no perdonan tu as en la manga dispuesto
a hacer trampa
el juego es duro si no tomas en cuenta
que el otro también piensa
y ajusta el cinturón de la sota
o acomoda el arnés del caballo
con la misma facilidad que tú diriges
el cetro del rey de copas
el oro brilla con su rostro de moneda
desde mi triunfo y la espada traicionera
que ya no espera herir al que baje los brazos
se fue al mazo
no hay posibilidad, no hay ni lo pienses
el dos de bastos está en la mesa observándote
sin deseos de retroceder
porque es casi mío, no acepto que lo reclames
el juego se termina y no hay revancha.